Por OSVALDO RODRÍGUEZ SUNCAR

El finado empresario Don Miguel Feris Iglesias, fallecido hace un par de años, merece ser electo al Pabellón De La Fama Del Deporte Dominicano como propulsor.

Feris Iglesias estuvo ligado a las Estrellas Orientales desde su niñez, habiendo sido recoge bates del equipo.

Al momento de su fallecimiento, en el 2015, la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana, había anunciado unas semanas antes que le dedicaba el torneo 2015-2016, por sus valiosos aportes al béisbol profesional dominicano. Tuvo la suerte de recibir ese reconocimiento en vida, aunque no lo disfrutó plenamente, por haberle llegado la muerte antes del inicio del campeonato.

A Miguel Feris tocó salvar la franquicia de las Estrellas Orientales, en un momento en que parecía la misma podría desaparecer, por falta de quien se responsabilizara de ella.

La LIDOM, entonces presidida por su entrañable amigo y antiguo compañero de estudios de Derecho Leonardo Matos Berrido, le pidió salvar ese tradicional equipo.

Feris buscó un grupo de empresarios, según me contó él mismo, entre quienes se contaron el actual presidente de las Estrellas, Don José Manuel Mallén, y el joven José Miguel Bonetti Dubbrei, actual vicepresidente del equipo Leones del Escogido.

Ellos tres se repartieron a partes iguales el 75 por ciento de las acciones de las Estrellas. El 25 por ciento restante quedó en manos de un grupo de accionistas minoritarios, varios de ellos reclutados por Don Miguel también.

La estructura así creada, para la cual se formó la empresa Corporación Deportiva de San Pedro de Macorís, según recuerdo el relato que me hizo Don Miguel, y me ha confirmado varias veces el señor Mallén, se hizo cargo de las operaciones del tradicional equipo de San Pedro de Macorís, el cual llegó a estar en manos de la LIDOM, por falta de quien asumiera ese serio compromiso.

La Corporación Deportiva de San Pedro de Macorís hizo un depósito de cinco millones de pesos en una entidad bancaria, como garantía que permanecería por lo menos cinco años manejando a las Estrellas, con el compromiso de una vez vencido ese período le sería reembolsada la suma de dinero.

Don Miguel, en forma entusiasta, aceptó presidir la corporación y el equipo, al cual le dio todo el respaldo económico, vía publicidad y patrocinio del uniforme. Ese patrocinio de las empresas de su familia (entre ellas César Iglesias) se inició en la época de la llamada Pelota Romántica (en la década del 50) y se ha mantenido hasta hoy.

Me contó Don Miguel, que él y el publicista José Augusto Thomen llegaron a comprar los derechos de transmisión por radio de los partidos de las Estrellas, en los años 60, cuando la mayoría de las acciones del conjunto pertenecían a miembros de la familia Antún, y Don Rafael Antún era su presidente. El precio, de acuerdo al relato de Feris Iglesias, era de RD$100.00 por cada juego.

Don Miguel también le dio su efectivo y sólido respaldo, junto a las empresas de su familia, al equipo Cocolos de San Pedro de Macorís, de la Liga Nacional de Baloncesto, el cual también perteneció a la Corporación Deportiva de San Pedro de Macorís, localidad donde fue patrocinador de equipos de béisbol, softbol, baloncesto, por más de cinco décadas.

Fue con Don Miguel con la persona que yo hube de cerrar acuerdo, por intermedio del señor Mallén y Pavel Aguiló, cuando entré a trabajar con las Estrellas Orientales, en la temporada 2009-2010.

De una reciedumbre moral a toda prueba, Don Miguel fue un luchador antitrujillista, por lo cual llegó a estar preso y vióse su familia se vio precisada a sacarlo del país, durante la oprobiosa Era de Trujillo.

Con más de 50 años como promotor del deporte, contando entre sus acciones la de respaldar y salvar una de las más tradicionales e importante entidades del deporte dominicano, como es el equipo de béisbol Estrellas Orientales, Don Miguel Feris Iglesias, merece ser exaltado al Pabellón De La Fama Del Deporte Dominicano, en nuestra humilde opinión.